¿Vale la pena reparar su lavadora o refrigerador viejos?
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¿Realmente vale la pena reparar su lavadora o refrigerador? Le ayudamos a tomar una decisión informada.
¿Qué tiene que poner en la balanza para ver si conviene una reparación?
En el caso de los refrigeradores y las lavadoras el tiempo que tiene el electrodoméstico con usted puede ser determinante para su decisión, se sugiere tomar en cuenta la amortización para elegir su reparación.
La amortización es el tiempo que tarda en recuperar la inversión realizada en un bien. En el caso de un electrodoméstico, mientras más se utiliza, es mayor el beneficio que se obtiene de su uso, lo que permite ir recuperando progresivamente el valor invertido.
Si bien el gasto que se hizo se recupera mientras se usa la lavadora o refrigerador, su valor como tal disminuye con el tiempo. De acuerdo con Universal Blue, hay una fórmula que puede ayudar a determinar si es conveniente reparar un electrodoméstico:
Método de la amortización= Precio del electrodoméstico + Precio de reparación ÷ Años que le quedan de vida
El costo que arroje puede ayudar a decidir si conviene la reparación o no.
Otros factores para considerar
Reparar los aparatos en lugar de desecharlos, contribuye a disminuir la generación de residuos electrónicos, uno de los mayores problemas ambientales actuales.
De acuerdo con Statista, en promedio, cada persona en México produce entre 9 y 12 kilogramos de desechos electrónicos por año lo que hace a nuestro país el segundo mayor generador de residuos electrónicos en América Latina y el Caribe.
Al elegir reparar ayudamos a cuidar la atmósfera y reducimos el uso excesivo de energía y recursos no renovables necesarios para producir nuevos electrodomésticos.
Por último, como ocurre con una vivienda o un vehículo, cuando compramos un electrodoméstico esperamos que nos acompañe durante muchos años. Reemplazarlo prematuramente significa desaprovechar parte de la inversión realizada. Apostar por su reparación reafirma que fue una compra acertada.
¿Cuándo sí conviene reparar?
Es conveniente cuando el costo de la reparación no supera el 50 % del valor de un electrodoméstico nuevo similar. Esta regla práctica ayuda a evaluar si la inversión es razonable en comparación con adquirir un aparato nuevo, especialmente si el equipo aún cumple con sus funciones esenciales o pertenece a una gama alta.
Otra situación donde vale la pena reparar es cuando se trata de una avería sencilla y localizada, como el reemplazo de un termostato, una bomba de agua o un módulo electrónico. Estas reparaciones suelen ser mucho más económicas y rápidas que cambiar todo el electrodoméstico, prolongando su vida útil y manteniendo el rendimiento que ya conoce y en el que confía.
Elija A Domicilio Servicio Urgente, nuestro personal está capacitado para reparar su refrigerador o lavadora y asegurar el cuidado de su inversión. Tenemos cobertura en la CDMX y el Estado de México.